El mar Báltico es una zona geoestratégica, y ahora con la entrada de Suecia en la OTAN, toda la costa estará conformada por Aliados, ellos son: Suecia, Finlandia, Estonia, Letonia, Lituania, Polonia, Alemania y Dinamarca. De igual manera, bajo este mar cruzan diversas líneas comunicativas, así como gasoductos que son de vital importancia para Europa y por tanto esta alianza pretende la protección de la infraestructura submarina y marina, y el paso cada vez mayor de independencia de la UE de Rusia en tema de recursos energéticos.
Esta alianza da un acceso muy limitado a Rusia, y el Kremlin advirtió que la alianza definitivamente sería negativa para Europa. De igual manera la ratificación de la adhesión a Suecia podría no producirse de manera rápida puesto que Turquía es un obstáculo para lo mismo; para ello, se han reanudado las conversaciones de adhesión de Turquía a la UE.